martes, junio 22

D10S, EL MESSIAS Y EL MILAGRO EN PERSONA

Es difícil no ilusionarse con la actualidad de nuestra selección, 3 ganados sobre 3 jugados te tranquilizan de cara a lo que se viene, como así también el buen nivel que se demostró en cada juego. También es difícil sacar grandes conclusiones cuando una vez más nos tocó un rival que no estuvo a la altura de una copa del mundo.
Argentina volvió a ser superior, a controlar el partido y a buscar los espacios sin desesperarse. Este era un equipo con muchos cambios (siete) y por ende un conjunto que poco se conocía en acción. Es cierto, nuestros “suplentes” serian titular en cualquier país del mundo, pero desde el vamos no era lo mismo. Se sabía que salvo catástrofes ya estábamos clasificados y primeros en la zona, así que tomárselo más relajadamente y cuidándose para lo que realmente importa podría haber ocurrido tranquilamente. No fue así, los dirigidos por Maradona lo buscaron todo el partido, y aun con el resultado a su favor, trataron de sobrepasar el juego destructivo de los europeos.
Me sorprendió como los griegos se metieron fervientemente atrás los 90 minutos, no por sus características ni la filosofía ultra defensiva de Rehaggel, sino porque se quedaban irremediablemente afuera. Sabiendo que Corea empataba con Nigeria y que un gol que los pusiera adelante en el marcador los metía históricamente en la siguiente fase, prefirieron mantenerse aguantando un cero en su arco que era casi imposible de sostener. Los helénicos se ocuparon de ser un bloque seguro, que principalmente Messi no desequilibrara ni que les generaran claras chances de gol. Después, que Samarás en soledad extrema se las arreglara para atacar. Así y todo, casi abre el marcador después de un nuevo error de Demichelis y un rebote fortuito para el delantero del Celtic que dejo a Romero desubicado. Grecia fue la nada misma.

Messi estuvo impreciso, siempre rodeado por 3 o 4 griegos que no lo soltaron nunca, igualmente un par de apariciones le alcanzaron para desequilibrar. El maldito gol no quiere aparecer para el del Barca, quizá el destino se los guarda para los momentos culmines. Por otro lado, me alegró ver a Leo con la cinta de capitán y comandando al equipo. Se nota cada vez más que el rosarino esta enchufadísimo.
Destacando al resto del plantel, sin duda el gol de la victoria del defensor del Bayern Munich le servirá para recuperar la confianza que puede llegar a haber perdido frente a Corea. Es para tener en cuenta a Otamendi de buen rendimiento como lateral derecho como también las subidas de Clemente Rodríguez por la izquierda. Pastore entró con sus 21 años a un mundial y no le pesó nada. El cordobés tiene una calidad bárbara para jugar y puede ser muy beneficioso para juntarse con la “pulga” cuando se lo necesite. En fin, todos aprobaron.
Dejo para el final un párrafo aparte para Martín Palermo. La luz que persigue a este terrible goleador viajo hasta Sudáfrica para escribir un nuevo capítulo en su legendaria vida. El reconocimiento merecido para tanta carrera se vio en esos 10 minutos que Diego lo tiró a la cancha y en un gol, que como frente a Perú, lo tenía en el lugar justo en el momento preciso. Estoy seguro que el tanto marcado por el ídolo de Boca es hasta el momento el más gritado por todos nosotros.

Ahora a pensar en México. Como hace 4 años nos volvemos a ver las caras y a eliminarnos en esta instancia. Somos superiores pero no hay que confiarse y se les debe tener respeto. A partir de ahora nos tocan equipos serios y es sabido que un traspié nos manda a casa.
El domingo a las 15:30 comienza la verdadera Copa del Mundo para la Argentina. Dimos tres pasos, los más fáciles. Faltan cuatro para la gloria.

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